Cuando pensé en la posibilidad de hacer yo mismo los
bizcochos de soletilla no imaginé que pudiera conseguir ese sabor y esa
textura que los caracterizan, sin embargo esta receta es tan simple que, me di
cuenta que con cuatro ingredientes se
pueden crear deliciosas maravillas. Si no tendría que trabajar, me pasaría todo
el día en casa horneando cosas ricas.
Los bizcochos de soletillas son conocidos en todo el mundo,
y en cada lugar tiene un nombre diferente, por ejemplo, aquí en España se
denominan así… bizcochos de soletillas, en Italia… en Savoiardi, en Argentina…
vainillas, en Perú… bizcoletas, en Reino
Unido… sponge fingers y en Estados Unidos… Ladyfingers. Así podríamos estar un
buen rato nombrando estos deliciosos bizcochitos que son perfectos para acompañar un buen chocolate
caliente.
Son muy conocidos por el famoso postre italiano llamado
Tiramisiu., pero… ¿de dónde provienen los bizcochos de soletilla? Se inventaron hace muchísimo tiempo, a finales
del siglo quince en la corte del Duque de Saboya cuando este último recibió la
visita del rey de Francia. Luego se
denominaron Savoiardi, transformándose en las galletas típicas y oficiales de
la corte. Hoy en día se consiguen en
cualquier supermercado y como te enseñare ahora puedes realizarlos tú mismo en
casa.
¿Qué necesito?
160 gr de Claras de huevos (Aproximadamente 6 claras)
100 gr de yemas de huevos (aproximadamente 6 yemas)
25 gr de Almidón de maíz. (Maizena)
140 gr de harina para todo uso.
100 gr de Azúcar blanquillo.
Un pellizco de sal.
1 cucharada de esencia de vainilla.
40 gr de azúcar blanquilla extra.
200 gr Azúcar glas más o menos.
¿Cómo lo hago?
Para preparar estos bizcochitos vamos a preparar dos batidos
y luego los vamos a integrar muy bien.
Bate con la ayuda de unas varillas eléctricas o un robot de
cocina las yemas con los 40 gr de azúcar y la esencia de vainilla. A medida que
bates la preparación te darás cuenta que esta cambia de color ( se aclara) y
cambia la textura ( queda esponjosa y firme) esto es lo que se llama punto
letra. Reserva este batido para utilizarlo más adelante.
En otro bol, completamente limpio, bate a máxima velocidad
las claras y la sal hasta obtener unas claras batidas a punto de nieve ( las
claras se volverán blancas y muy espumosas) ahora añade el azúcar poco a poco y sigue batiendo hasta obtener una
crema firme, brillante y sedosa. Este proceso puede llevarte un buen rato pero
no intentes adelantarlo ya que es el truco para que estas galletas te queden
espectaculares.
En un bol amplio tamiza todos los ingredientes secos, la
harina y la maicena.
Para terminar y únicamente utilizando movimientos
envolventes mezcla el batido 1 con el 2.
Y añade poco a poco los ingredientes secos ya mezclados. Recuerda no golpear
el bol y realizar movimientos muy suaves para no perder ninguna burbuja de
aire.
Prepara una placa para horno forrada de papel de cocina y
coloca la preparación en una manga con boquilla lisa redonda. Preciona la manga
pastelera sobre la bandeja realizando rollos de entre 15 y 20 cm de largo. Espolvorea
las vainillas con mucha cantidad de azúcar glas. Y hornea a 200º C ( horno
fuerte) de entre 8 y 10 minutos.
Déjalas enfriar y comienza a disfrutarlas… mi idea era
utilizarlas para hacer un buen tiraminu, pero no quedo ni una…
TRUCO: Si quieres que
los bizcochitos de soletilla tengan esa textura tan característica después de
espolvorearlos con azúcar glas , rocía con un poco de agua (muy poca) y vuelve
a espolvorearlos con más azúcar glas. Quedan de maravilla.
Espero que las hagan y como siempre les digo… hasta la próxima
entrada.
Damian te han quedado perfectos. Un besazo.
ResponderEliminarEsto tengo que probarlo, a mi hija le encantan!!
ResponderEliminarQuė presentación tan bonita , gracias por publicar esta maravillosa receta :)
ResponderEliminarEstos bizcochos caseros suenan increíblemente fáciles y deliciosos, ¡perfectos para hacer tiramisú o simplemente para disfrutarlos solos!
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